Hospedaje muy bien ubicado para visitar lugares y parajes con encanto en Cantabria: playas, rutas por acantilados, pueblos, y disfrutar de la gastronomía. Rodeado de prados y muy tranquilo, y bien comunicado. Las habitaciones son amplias con una limpieza excelente, lo que hace muy confortable la estancia. Gema y su madre atienden con cariño y dedicación la hospedería, sugiriendo sitios para visitar en función de tus preferencias. Muy recomendable para descansar y a la vez disfrutar de Cantabria.
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