Unos amigos, que van mucho a Santander, nos recomendaron este restaurante, está muy cerca de las cuevas del Soplao, por cierto maravillosas, el restaurante muy cerca de las cuevas, solamente tengo palabras de agradecimiento, los dueños nos dieron un trato muy especial y cercano, la comida exquisita, se nos hacia la boca agua de ver los platos que servían, nuestros amigos nos recomendaron el cocido montañés, creerme el mejor que he comido, nos comentaron los dueños que la pringa era de su matanza, pedimos ensalada mixta de su huerta, nunca he comido unos tomates así, con sabor, color carmesí una pasada, tomamos cecina y chorizo casero, de muerte, para terminar bien la tarta de queso casera al horno, todavía quedaba un hueco para esta delicia, en fin, solo os puedo decir que no dejéis de ir, es 10/10, al pagar coincidí con un cliente y los dos lo comentamos, ellos comieron carne y parece que estaba buenísima, seguro que repetiré para degustar más platos, incluso te puedes alojar, la zona es una belleza natural, he visto pocos sitios así, buen provecho viajantes, que disfrutéis como yo lo hice, se me olvidaba el precio lo mejor, ;)
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