Hoteles de Cantabria cerca de la playa

Hemos estado tres noches de julio, la posada es preciosa por fuera y por dentro, nos toco la habitación más alta y aunque no tiene ascensor es fácil de subir las maletas, además nada más llegar nos recibió Coral, quien aparte de acompañarnos a la habitación nos dio un montón de recomendaciones de a donde podíamos ir y donde comer, consejos que nos fueron de mucha utilidad, la habitación cómoda, muy limpia y muy acogedora, tiene un parking privado de 5 plazas gratuito, solo un día tuvimos que aparcar fuera pero es muy fácil aparcar alrededor del parque que esta enfrente, esta situada a dos minutos andando de la calle principal y para moverse en coche hacia Comillas, Santander y otros lugares de interés esta perfectamente situada, nos fuimos encantados con todo, muy recomendable.

Alojamiento super acogedor. Atención super atenta de M.Jesús desde la llegada. Alojamiento totalmente reformado con mucho gusto donde se nota el interés de la anfitriona por agradar a sus huéspedes. Dedicación y detalle. El alojamiento ha superado mis espectativas con muy buena relación calidad precio. El baño totalmente reformado. Las imágenes de la web son de antes de la reforma., Ahora está mucho más moderno. Las puertas de roble que dan un toque muy acogedor. La cama súper cómoda y con M.Jesus muy atenta de que tuviésemos el juego de cama necesario en función de la temperatura. Todo muy muy agradable. La habitación tiene una pequeña cámara frigorífica lo que es una gran ventaja ya que es una zona donde puedes comprar muy buenos quesos y eso te permite guardarlos con calidad. Además facilita tener alguna bebida fresca. Gran detalle que agradecimos nada más llegar. La casa está en un enclave privilegiado porque está al lado de la calle principal de Santillana, pero justo en una calle de mucha tranquilidad que permite aparcar el coche tranquilamente en la misma puerta del alojamiento, destinado a los huéspedes y te reporta la tranquilidad de una noche plácida y feliz. La habitación da a un prado con las montañas al fondo permitiendo un despertar bucólico. Qué más se puede pedir!!!!! Muy a tener en cuenta si regresamos por la zona ya que, además, Santillana del Mar está estratégicamente situada para visitar localidades preciosas de la zona.

A mi esposa y a mi nos gustó mucho la amabilidad y el trato del personal del hotel, especialmente de la recepcionista Graciela, que nos facilitó mucho la entrada y buena estancia en el hotel. Tuvimos una estancia tranquila en habitaciones bien cuidadas y limpias. El desayuno bufet muy bueno y variado. El hotel Infantes está ubicado en un punto geográfico intermedio que facilita mucho la comunicación para poder recorrer todo Cantabria de un extremo a otro.