POSADA GRAN SOL

Una posada 100x100 recomendable, Puri y su hija Virginia, un trato familiar y te hacen sentir como en tu casa, lugar tranquilo, limpieza y mejores vistas, sus bizcochos buenisimos para desayunar, volveremos sin duda.

Sitio tranquilo y familiar, lo recomiendo.

Puri es maravillosa. Llamamos a última hora para saber si había posibilidad de hospedarnos y nos esperó sin problema. El desayuno estaba muy rico, el bizcocho de maravilla. Yo traje mi leche de soja y me preparó mi colacao sin problema. La habitación es muy amplia y la cama súper cómoda. Volveremos pronto ♥️

Nos llevamos muy gratos recuerdos de nuestra estancia, sobre todo a nivel humano. Fueron dos noches. Una vez finalizada, volvimos al rato para que el nieto volviera a pasear con nuestra perra, a quien se había apegado mucho, y compartimos con la familia la sobremesa de una celebración, charlando también con su marido. Habitación sencilla pero muy limpia, amplia, con buena luz. Baño con buena presión de ducha. Parking de cemento privado justo frente a la entrada. Al estar con perra desayunamos junto a la puerta bajo un toldo, donde hay varias mesas distribuidas. Café con leche, bizcocho y tostadas. También al estar con ella nos asignaron habitación en la planta baja, lo cual no nos supuso ninguna pega. Situado en un desvío de la carretera, junto a un camino tranquilo rodeado de casitas bajas. Muy cerca, en coche, Santillana y otros pueblos grandes donde hay buenos restaurantes y paseos por el río. Buena situación para conocer tanto la costa como el interior de Cantabria. Este fue nuestro objetivo, y quedamos impresionados de la belleza de Barcena Mayor, Cartes, Carmona, y otros tantos que están no muy lejos. Gracias por todo, Puri. Si volvemos o pasamos cerca, nos acercaremos para que tu nieto vuelva a pasear a la loba.

Posada auténtica de la zona y Puri, la dueña es un amor, muy amable y hace que tu estancia sea muy acogedora. Los desayunos caseros muy ricos con bizcocho casero. Volveremos sin duda, muy aconsejable para conocer la zona, muy bien comunicado a menos de 30 min de Santander y cabarceno. La playa a menos de 10 min y Suances a tiro de piedra.

Ha sido perfecta como si estuviera en casa el trato muy familiar el sitio perfecto para descansar y está cerca de muchos sitios con encanto tanto Puri como José Luis y su hija un trato familiar y pendientes de todo lo que necesites limpieza total si vuelvo algún día sin duda iré allí.

Estancia genial de dos noches. La dueña muy atenta en todo momento. El hotel está al lado de Santillana (2'5 km) y entre el hotel y Santillana hay varios restaurantes por la carretera y una panadería. Sin duda lo recomendaré a familiares y amigos. Las habitaciones muy limpias.